miércoles, 12 de junio de 2013

Winston Churchill, el más querido y el más odiado.

              

                 WINSTON CHURCHILL



   “Quien habla mal de mí a mis espaldas, mi culo contempla.”



         Nació en Oxfordshire, 1874, y fue una de las figuras clave del siglo XX. Su larga trayectoria política abarca desde su primera elección como diputado en 1904 hasta su último periodo como primer ministro en 1951. Su éxito internacional se debe indudablemente a su papel en la Segunda Guerra Mundial, cuando dirigió al Reino Unido en su lucha contra Hitler.

              Durante el periodo de entreguerras Churchill fue poco comprendido, y sucesivamente el hombre más popular y el más criticado de Inglaterra, y a veces ambas cosas al mismo tiempo.



    “Si el presente trata de juzgar el pasado, perderá el futuro.”


                Furibundo conservador, sus medidas contra la huelga general de 1926, su apoyo a Eduardo VIII o su no disimulada simpatía por Franco le hicieron muy impopular entre la clase obrera británica.  Comentando su actitud ante un eventual ascenso al poder de Hitler, afirmó: "Si un perro se abalanza contra mí, le pego un tiro antes de que me muerda". Apartado de la política activa y aislado en su partido fue un crítico inmisericorde de la política de Chamberlain.





Churchill alentó a la búsqueda


de una gran alianza con Rusia

y Francia que frenara el

expansionismo nazi. El pacto

de no agresión germano-

soviético puso fin a esta

esperanza.










            Tras la anexión de Checoslovaquia, la postura largamente defendida por Churchill de firmeza ante Alemania se reveló como la correcta. Al estallar la guerra, fue nombrado Primer Lord del Almirantazgo y tras la invasión de Francia fue nombrado Primer Ministro.
          En el Parlamento, sus discursos y su buen humor le hicieron famoso. Pero su espíritu independiente, reacio a someterse a disciplinas partidarias, le granjeó importantes enemigos en la cámara, incluso entre sus aliados. Así pues, no es de extrañar que sus intervenciones, a la vez esperadas y temidas por todos, suscitaran siempre tremendas polémicas.

         Churchill formó un gobierno de unión nacional en el que que él desempeñó también el papel de ministro de Defensa. En su primer discurso ante la Cámara de los Comunes, el 13 de mayo de 1940, pronunció su célebre discurso en el que, tras afirmar que no tenía  nada que ofrecer al pueblo británico "excepto sangre, sudor y lágrimas", consiguió unir al pueblo británico en su esfuerzo de guerra contra Hitler.


          Buscó desde un principio la alianza con Estados Unidos y su relación personal con Roosevelt facilitaron la progresiva implicación norteamericana. En agosto de 1941, en su primer encuentro con el presidente de EE.UU., firmaron Placentia Bay,  Terranova, la Carta del Atlántico, declaración común de principios.


           “Una buena conversación debe agotar el tema, no a los interlocutores.”

            Pese a su postura anticomunista, no dudó en buscar la alianza con Stalin. Churchill, fue, en definitiva, el gran forjador de la "Gran Alianza", EEUU, URSS y el Imperio Británico, que llevó a la victoria de los Aliados en la segunda guerra mundial.

Como líder británico, participó en las distintas cumbres de los Aliados a lo largo de la guerra.



            Sin embargo, en 1945 fuera derrotado en las elecciones por el laborista Atlee, quién le sustituyó en la Conferencia de Potsdam que se estaba celebrando en aquellos momentos.

            Fuera del poder tuvo un papel destacado como abanderado de la unidad europea y partidario de una política de firmeza ante la Unión Soviética. En 1951 desempeñó por última vez el puesto de primer ministro.



Aquí dejo un vídeo que resume (un poco por encima) la vida de este anticomunista:

http://www.youtube.com/watch?v=ZsNhmEMkjb8




Bibliografía:

Wikipedia, Biografiasyvidas, youtube, proverbia.net, e historiasiglo20.com.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Trabajo: Víctor Manuel II

                                     Víctor Manuel II

                               


(Nombre completo: Vittorio Emanuelle Maria Alberto Eugenio Ferdinando Luca Tommaso di Savoia-Carignano).
Nació el 14 de marzo de 1820 en Turín. Era hijo de María Teresa de Habsburgo-Lorena, hija del gran duque de Toscana, Fernando III, y de Carlos Alberto, rey de Cerdeña (1831-1849), que abdicó en su favor cuando le vencieron los austriacos en la batalla de Novara en el año 1849.
Su gobierno tuvo la notable influencia de Camillo Benso di Cavour, primer ministro, desarrolló un gobierno parlamentario, reguló las finanzas, ayudó al comercio y la industria y secularizó las propiedades eclesiásticas; logró, mediante su habilidad diplomática, que Napoleón III apoyara al Piamonte en contra de Austria, logrando derrotar al ejército austriaco en las batallas de Magenta y Solferino en 1859.
También apoyó (1855-1856) a Gran Bretaña y a Francia en la guerra de Crimea.
También apoyó el proceso de unificación italiana. Rechazó a los austriacos en la invasión del Piamonte en 1859, y añadió Lombardía a su reino. Fue aceptado por los estados centrales como rey, y una vez que el patriota italiano Giuseppe Garibaldi acabó con el reino de las Dos Sicilias en 1860-1861, se convirtió en el dueño de toda la península, a excepción de Venecia, que aún estaba en poder de los austriacos, y de los Estados Pontificios.
Proclamado rey de Italia en 1861. Italia consiguió Venecia tras combatir al lado de Prusia en la Guerra Austro-prusiana de 1866. En 1870 Roma fue anexionada y se convirtió en la capital de Italia.

Como anécdota en la vida de Victor Manuel II, podría destacarse que en 1885 comenzaron las obras para la edificación de un monumento conmemorativo dedicado a Víctor Manuel II de Italia, en la Piazza Venezia de la ciudad de Roma. Víctor Manuel II de Piamonte había sido entronizado rey de su reino.
Víctor Manuel II falleció en 1878, en Roma, y fue sucedido por su hijo Umberto I. Bajo el reinado de éste, comenzó la edificación del monumento conmemorativo en cuestión. Fue levantado en mármol de Brescia, de un blanco resplandeciente.
En el monumento se levantó una estatua ecuestre de bronce dorado, que posee el récord de ser la mayor de su tipo en el siglo XIX, ya que tiene una altura de ¡12 metros! (debe ser también la más pesada, con sus 50 toneladas...).
En el monumento está el "altare della patria" ("altar de la patria"), así como la tumba del soldado desconocido, que en el protocolo italiano es de visita obligada para los visitantes de Estado que sean extranjeros.
La inaguración, un tanto precipitada, fue hecha en 1911, pero fue bajo el gobierno de Benito Mussolini, en 1927, que por fin se le dio término a las obras en el monumento.